Fleur de Miraval, el rosé que el actor elabora en su bodega de Champagne fue, por segundo año consecutivo, el único espumante servido durante la 95ª edición de los Oscar.
Es conocida por ser la única maison dedicada exclusivamente a elaborar champagne rosado, Fleur de Miraval. Este proyecto nace de la colaboración entre tres familias: la de Brad Pitt, propietaria del Château Miraval en la Provenza; los Perrin, propietarios del Château de Beaucastel; y la familia Péters, con raíces en el corazón de Champagne a lo largo de seis generaciones. Juntos decidieron hacer un rosado muy particular.
El pasado domingo 12 de marzo, los invitados a la 95ª edición de los Oscar pudieron disfrutar de sus bondades de manera exclusiva, por segundo año consecutivo, ya que fue el único espumante servido durante la ceremonia, así como también el Governors Ball, la fiesta posterior de la Academia, y en otros eventos relacionados con los Óscar en Los Ángeles, Nueva York y Londres, incluido el almuerzo de los nominados.
La edición de este rosado de chardonnay y pinot noir se ha elaborado a partir de una base de la añada 2018 con degüelle en mayo de 2022 y un dosage de 4,5 G/L y representa la esencia del equilibrio y la delicadeza. “El rubor rosa en la copa deja paso a una nariz soberbia, cuya paleta aromática ofrece notas de flores blancas, grosellas y fresas silvestres, antes de revelar toques ligeramente ahumados. Con una burbuja particularmente fina y etérea, la boca de este champagne es fresca y vibrante, llena de frutas blancas y toques cítricos que evolucionan hacia matices más complejos de frutas confitadas, especias suaves y almendras tostadas. El final es increíblemente persistente, guiado por una magnífica mineralidad calcárea”, exponen desde la bodega.